jueves, 25 de septiembre de 2008

Comitancillo entre las orejas

Dicen los ancianos que, antiguamente, cuando se les preguntaba a las personas a dónde iban, ellos contestaban “Ma Chin Txolja”, que traducido al español quiere decir “Voy a ir donde hay fila de casas”, “Donde las casas están ordenadas”. Los expertos en arreglar o desarreglar las cosas dicen que en el idioma Mam el nombre del Municipio es Txolja, término que se deriva de "T-xol" (sustantivo: relación que quiere decir "en medio o entre"), y de "a" (agua, río): “Entre Ríos”.

Hoy los ríos están secos, a pesar de la temporada de lluvias, los bosques de pinabete, pino y cipreses están tristes y secos, a pesar de los cuidados y defensa de la comunidad. Las casas siguen ordenadas, siguen quitas y serias, con la seriedad ancestral del adobe, siguen en fila como esperando la orden de levitar. Pero aquí solo levitan las partículas de un sueño colectivo perdido entre las piedras del cerro.

Salí de la capital de Guatemala a las nueve de la mañana, desde la 20 calle allá por el mercado la presidenta, en donde piezas de carros que lucen como trofeos colgando de las vigas de las galeras, me esperaba un viejo bus azul de los transportes Marquencita, que lucía un letrero con letras blancas que gritaba quieto desde el vidrio “San Marcos”, busqué un lugar cómodo, sabia que me esperaba un viaje de mas de 6 horas. Afortunadamente junto a mi había una almohada de sueños y bocanadas.

Para la ocasión elegí “Guatemala, las líneas de su mano” de Cardoza y Aragón mientras la Marquencita avanzaba sobre la interamericana yo me hundía en la historia de Guate desde sus escritores, desde Bernal Díaz del Castillo hasta Gomez Carrillo, de la mano de Cardoza que no dejó títeres con cabeza, por que sabia que no deben tenerla.

Para el medio día llegamos a cuatro caminos, esa bifurcación estruendosa que te deja ante al disyuntiva de ir seguir al norte rumbo al Quiché Rebelde o más allá hasta el triangulo Ixil o rumbo a los Cuchumatanes, a huehue y san marcos a Xela con todo y sus fríos cerros. Por esta vez el destino estaba trazado, así que solo aprovechamos para comprar tortillas con carne adobada y chile relleno.

Después de San Marcos inicia el ascenso hasta Comitancillo, la carretera de terracería hace bailar la camioneta “chicken bus” le llaman los turistas fatuos, parrillera le llamamos nosotros, ya avanzamos sobre el cerro pero entre las nubes, el frío cala los flacos swaters, pero no importa, estar aquí es mucho, mucho más que el frío.

Una hora después terminamos el ascenso, y Comintancillo nos recibe con escasa luz, pero con su ruidoso ir y venir de calles pequeñas, limpias y ordenadas, un enorme y feo monumento a la estrategia contrainsurgente es lo primero que se distingue en su calle principal, una iglesia evangélica abre sus fauces hambrientas de feligreses y grita sus verdades, para quien quiera escucharlas.

Ya es de noche, así que buscamos donde recostar la cabeza para mañana en la mañana salir en busca de la mejor foto, de la mejor entrevista, de la mejor historia, los cerros duermen escondidos allá en el cielo oscuro, el viento corre con fuerza congelando las pupilas, buenas noches.

Día de plaza en Comitancillo, frutas, olores y colores por todas las esquinas, una pareja se jaloneaba en un callejón, el repetía casi suplicando Waja tija, Waja tija, que se escuchaba guturalmente desesperado, ella lloraba y decía en español, Después, después, ella corrió hacia la esquina contraria y el se quedó viendo el espacio vacío en donde ella ya no estaba, repetía ya para si mismo, Waja tija, mas tarde supe que significa te amo.

Antes de finalizar mi visita me encontré con el símbolo de lo que somos hoy como sociedad, como quien no quiere la cosa, un disco de la banda “Sobrevivencia” me guiñaba un ojo, ya seducido por su portada pedí escucharlo, los guitarrazos rockeros desentonaban con el mam del cantante que gritaba un rock-son chapin. A la primera “oida” el disco desentona, pero ya por la tercera o cuarta vez que lo escuchás, todo cobra sentido, una perfecta armonía entre el idioma maya ancestral, las guitarras eléctricas y una bateria que se codea con una marimba poco tímida y bien rockera.

Ahora después de una semana de escuchar el disco varias veces al día, no se si es rock en Mam, o Mam en rock, de lo que estoy seguro es que hay amor en las letras, estoy seguro que hay rock en Comitancillo, San Marcos.

Si los quieren visitar y escuchar http://www.myspace.com/sobrevivencia









miércoles, 17 de septiembre de 2008

Libertad 15 de septiembre ¡Ja!




Todos los días, sin excepción, los guatemaltecos vivimos el surrealismo, no lo imaginamos, ni lo inventamos, ni lo creamos, lo vivimos, lo saboreamos, lo inhalamos.
Inconcientemente asistimos a un diario ritual surrealista, tan común como la muerte en este país, tanto que la gente ya no lo toma en cuenta, como a los cadáveres, como a la mediocridad.

Los momentos más surrealistas que recuerdo haber vivido son los actos cívicos que organizaban en la escuela, todos los lunes a las 8 en punto de la mañana, el General que ostentaba la presidencia daba su mensaje cívico a la nación, y los niños de toda la escuela debíamos formarnos en el patio frente a un radio de baterías, hacerle el saludo militar y jurar a la bandera. Si te reías, hablabas al compañero de al lado, o te movías, recibías varios reglazos del sádico profesor de matemática.

Pero también he visto a un gritón de camioneta muy singular, era mudo, se paraba en la puerta de la camioneta y agitaba las manos, al pasar frente a un grupo de posibles clientes se agitaba más y señalaba los rótulos, graznando como un cisne herido, abriendo los ojos, tanto que parecían desorbitarse.

Otro ejercicio que haría las delicias de André Bretón, es sentarte en un restaurante chino de la avenida Bolívar un domingo a las tres de la tarde. El olor de la grasienta comida, el calor, el sudor de la gente que se amontona, la ropa húmeda y colorida, los dientes llenos de oro, la música a todo volumen, los gruperos, los reggeatoneros, los rancheros, los hip-hoperos, y uno que otro metalero se reúnen en un lugar atestado de feromonas fuera de control, todos con un mismo objetivo, procrearse, con las buenas y con las malas, por las buenas y por las malas, (gracias Facundo), a las seis de la tarde tenés que estar en la otra banqueta, con tus litros en la mano, por que las broncas y las grescas son la guinda del pastel. Una mujer le aruña la cara a un sombrerudo que la corre lanzando patadas, dos mujeres meten sus manos golosas en las bolsas del pantalón de un triste borracho, un grupo de metaleros se abrazan y bailan una cumbia junto al grupo de hip-hoperos. Los gruperos y yo esquivamos, apostamos.

Ayer 15 de septiembre, desde las 8 de la mañana inició la fiesta final de la celebración por la “independencia de la patria” (surrealista el nombrecito), plumas, bombos, quepis, botas, y chavas rubias vestidas como indígenas se formaron desde las 5 de la mañana en la 6ta calle y octava avenida, frente al Arzobispado, pero concretamente frente a calcetas y calcetines Flamingo.

Hace años, cuando existía menos, encontraba sentido a las bandas escolares, a la disciplina militar a la que nos sometíamos como miembros de una banda y al fascista acto de los gastadores, pero era un sentido profundamente personal, que no tenía nada que ver con el aniversario de la independencia criolla, y no me equivoco al asegurar que todos los que en ese momento coincidimos en el mismo lugar pensábamos lo mismo, querías pertenecer a un grupo apreciado y reconocido dentro de tu circulo social, a cualquier precio, pertenecer, ser, estar, movilidad social, en su más primitiva concepción y respondiendo a los términos sociales de los adolescentes que éramos en esa época.

Ese año decidí unirme a la muchedumbre para intentar reconocer la motivación de esta nueva generación de chavos y chavas que no vivieron el conflicto en ninguno de sus niveles, una generación de guatemaltecos que no conoce y no le interesa conocer de ese pasado, chavos y chavas que de la mano del nuevo pensum de estudios inician su clase de historia contemporánea desde los Acuerdos de paz a nuestros días, eliminando de un codazo 36 años de guerra.

Y si, es una fiesta, maravillosa, bulliciosa, colorida, des-historiada, aculturizada, malinchista y alienada, pero fiesta al fin, los niños se cocinaban bajo el sol, los papas se peleaban con otros papas para que dejaran ver a sus niños, las ancianas codeaban a todo el mundo en su carrera hacia el mejor lugar, los escotes animaban a la afición. Las bandas celebraban no la “independencia de la patria” sino a ellos mismos, el desfile del 15 de septiembre es un inmenso concurso de bandas y de uniformes militares.

Los chavos y las chavas ya no quieren “pertenecer” sino ser vistos, hermosos y en llamas, claro que existen aún las bandas que imitan la estética militar y la actitud también, estatuas de cera que marchan con la vista al frente somatando sus tambores con fuerza y exacerbado orgullo, y la novedad desde hace algunos años, las bandas musicales, que lo marcial lo saben aplastar con ritmos merengueros que ponen a bailar las banderas que cuelgan de los ancianos balcones del Centro Histórico; congas, tubas, redoblantes, güiros y trompetas, destruyen la imagen fascista de los colegios “tradicionales” que los anteceden.

Después de una hora de escuchar el mismo ritmo una y otra vez, decidí salirme del lugar, que cada vez era más apretado y caluroso, tarea casi titánica, sin embargo, logré abandonar el lugar sano y salvo, me alejé un par de cuadras, y allí estaba la otra Guatemala, también bajo el sol, también celebrando a la patria, y celebrándola se celebraban, como todos los días, por que sin estas celebraciones simplemente no comen. Desde lejos agitaban sus banderas azul y blanco y gritaban algo que era indescifrable, por la distancia; el escudo nacional en las banderas se agitaba bajo el sol, se veía limpio, imponente, viril; ya frente a ellas lo pude escuchar claramente, “Cinco quetzales, a cinco, lleve su bandera a cinco.

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Pensando Guatemala



Es imposible pensar en Guatemala, sin imaginarse sus paisajes de desolación, sin sus postales coloridas y sonrientes, sin sus conos azules que te llenan las pupilas desde cualquier punto del horizonte. Una buena tarde cuando vas rumbo a la Universidad de San Carlos podés ver cómo el volcán de agua se impone al gris paisaje urbano.

Para quienes nunca han estado en Guate, la imaginación les fabrica, inevitablemente, una visión más bien romántica o turística en el mejor de los casos, en el peor de ellos, el miedo y la pestilencia de la muerte que los medios les han regalado los hace arrugar la nariz y blanquear los ojos.

Para quienes ya la han sobrevivido y están lejos, es la historia personal la que les grita desde algún rincón del cerebro, su olor de pólvora e incienso semanasantero asalta sus sentidos algo muerde allí adentro.


No estoy hilando fino, todo lo anterior está periodísticamente comprobado, hay grabaciones y declaraciones de Guatemaltecos y de hecho y de cohecho; los primeros dejaron el ombligo enterrado bajo alguna Ceiba, existente o no, en cualquiera de estos maiceros cuatro puntos cardinales, los segundos son los que nacieron en otra latitud y conscientes o no, decidieron visitar este país. Lo cierto es que unos y otros forman parte de una micra de la historia de este país y tienen responsabilidad de lo que somos como sociedad.

Los migrantes no son solo remesas, los extranjeros no son solo divisas y los que aplanamos las chapinas calles no somos únicamente zombies borrachos que nos comemos las extremidades inferiores, me explico:

Los migrantes han cambiado el rostro rural del país, de paso sostienen la economía nacional, las remesas que envían de distintas partes del mundo han mantenido a flote las estrategias macroeconómicas del Banco de Guatemala, cada fin de año un grupo de tecnócratas hacen una pomposa conferencia de prensa en donde explican como eficientemente han mantenido el tipo de cambio y como las tasas de interés no cambiaron en los últimos doce meses. Por supuesto que en ese informe obvian las ampollas en manos y pies de chapines que han sudado por esas impresionantes graficas que nadie entiende.

Los extranjeros armados de Euros y dólares hacen pujar la “industria sin chimeneas” perdón por el lugar común, pero me resultó irresistible, además la bien disfrazada buena intención de la cooperación internacional que invierte millonadas en proyectos de desarrollo social, pero bajo ese sonriente y reluciente disfraz hay intereses mineros, petroleros, comerciales, industriales. Ustedes sabrán, que los TLC´s, contratos, y permisos son precedidos de importantes inversiones, lo que resulta ser una bagatela para lo que en siguientes años ganarán en sus intervenciones (que no inversiones) económicas. Lo siento mucho por la guapa holandesa que conocí hace un par de noches pero le aclaro desde ya que la Unión Europea no es un club de beneficencia.


Y por ultimo, los que aún levitamos por acá no solamente nos dedicamos a joder al prójimo. Cada mañana las camionetas rebosan de hombres y mujeres que se codean, se patean y se tiran del pelo por abordar esos maltrechos buses que los llevan a su lugar de trabajo, el cual a fin de mes les remunerará con lo suficiente para no desfallecer y puedan llegar a los centros comerciales justo a tiempo para trucar la moneda por cosas y casos que al final del mes ya no existirán pero los obligarán a seguir con esa misma dinámica, día tras día, mes tras mes, hasta que la edad nos venza y por fin vayamos a parar con todo y huesos y cansancio perenne a donde ya no necesitemos ni la rutina.
En medio de todo encontramos el momento para hacer guatemaltequitos que reproduzcan lo que estamos construyendo hoy.

¿Vivir? ¿Sonreír? ¿Amar? Lo siento, no hay tiempo.

Por supuesto esta es solo una sección de nuestra sociedad, por hoy la tinta se acabó, la próxima semana seguramente encontraremos las piezas que le faltan al rompecabezas para comprender que sociedad tenemos o construimos, o inventamos o…

jueves, 4 de septiembre de 2008

Cancelación de PRAXIS

Saludos:

Ayer por la noche le decia a una amiga, "todas las cosas están en su lugar, no pasa nada", mientras se lo decía un cúmulo de recuerdos, nombres, voces, errores, aciertos me caía encima como apestosa ropa vieja; y se lo decía por que anoche la dirección de radio universidad me informó que decidió cancelar el programa Praxis.

La noticia me sorprendió, en la ultima temporada el programa logró un repunte en audiencia y en temas, el éxito se podia medir y percibir, sin embargo, nos cancelaron.

Quiero agradecer publicamente a todas las personas que llegaron la programa, a todos los que colaboraron, que dieron vida a Praxis, en especial a Mario Raúl Urizar que al igual que yo mantuvo Praxis por la pura convicción de que éste cubria un espacio de suma importancia para los sin voz.

El programa ya no saldrá al aire, pero mantendremos el blog semanalmente, así que los esperamos en ese espacio.

Gracias y hasta siempre.

Juan Calles
Praxis
Radio Universidad
sept. 2008

-----
Vivir la vida, No morirla
O:R:C:

Festival por la vida 2008

Ya es el tercer año consecutivo que se realiza el Festival por la vida en el campus central de la USAC, este año las bandas de rock se apuntaron, los skaters, rolling y bikers se pusieron en la lista, cortometrajes, teatro y poesia, todo junto para celebrar la vida.
El Programa para la Prevención de las ITS, VIH y Sida de la USAC lo organiza todos los años desde el 2006, este año se montó una fiesta reggae-ska para cerrar el evento.
Pero siempre hay un pero
El concierto de bandas de rock debía empezar a las diez de la mañana, pero el señor rector tenia reunión con diputados, asi que ordenó silenciar las bocinas, hasta el medio dia, con lo cual varias bandas se quedaron sin la posibilidad de mostrar su propuesta musical.

es común que cuando un ignorante se reviste de poder, aunque sea administrativo se torna en dictatorial y abusivo, eso pasó en esta ocasión, en la que la cerrazón de las autoridades sancarlistas no permitieron que un festival cultural se desarrollará con exito.


Cultura Urbana todo un éxito

Para el espacio de cultura urbana se convocaron a chavos y chavas skaters, rolling, bikers, ademas de graffiteros, mc´s y b-boyz la convocatoria fue eficiente y efusiva. hubieron concursos y repartición de condones, lubricante e información para la prevención.

Al final de la jornada grupos chapines como dubvolution, matocha, dj dubby dub, los skalda2 y killer tomato, hicieron la fiesta para celebrar la vida, de eso se trata, de vivir la vida no morirla.
será hasta el otro año que nos juntemos para soñar por un dia que la armonía y la felicidad son posibles en este país de la eterna primavera.