Año 2004
Desde sus inicios el tema de seguridad no salió bien librado, se evidenció que no existe política de seguridad y que solo se realizaron acciones coyunturales como los patrullajes combinados que no tuvieron mayor impacto.
Para la economía, los primeros en perder fueron los textileros, ya que se acabaron las ventajas para países como Guatemala y China ingresó a la Organización Mundial del Comercio –OMC-.
El Agro estuvo siempre a favor de los finqueros, ya que tampoco se planteó una política de desarrollo rural y se argumentó no contar con fondos para este rubro, sin embargo se destina el pago a ex Patrulleros con un monto total de Q.450 millones. Además solo se ejecutó el 48% de fondos para la compra de fincas del Fondo de Tierras. En este sentido no hay que olvidar las palabras de Rodas Martini, al recomendar que la sociedad civil no puede exigir este tipo de políticas a un gobierno liberal, por lo que es mejor que armen su propio partido político. A esto, el gobierno propuso varias mesas de diálogo pero ninguna dejó ver sus frutos. Como tampoco hay que olvidar el desalojo violento de la finca Nueva Linda, Retalhuleu, donde el saldo fue de seis campesinos y tres policías muertos.
Casi en esta misma calle podemos encontrar al tema de la minería, que empieza a dar luces en aquella época de los conflictos que seguirían después producto de la necesidad de ciertos sectores por ganar unos cuantos centavos a cambio de la exploración minera. Y es que no se toman en cuenta otros temas fundamentales, tales como los recursos hídricos, estratégicos y fundamentales para el desarrollo de la población. Las prioridades ambientales son ignoradas.
Y por si fuera poco, con el aumento de la inseguridad y la conflictividad agraria, el crecimiento económico comparado con el de la población quedó en desventaja, lo cual se tradujo en insuficiencias en los centros hospitalarios, abastecimiento de medicamentos y personal calificado. Los fondos de políticas públicas dejan en el inicio de largas penas a los guatemaltecos.
Febrero
El fiscal general Carlos de León fue destituido, por “ineficiencia”, por el presidente Óscar Berger, el 24 de febrero recién pasado.
El último día del mes, el Gobierno relanzó los acuerdos de paz, en el Palacio Nacional de la Cultura.
Abril
Berger anunció el 1 la reducción del 35 por ciento de las plazas, del presupuesto y las bases y zonas del Ejército.
Mayo
La gana se dividió con la salida, el 17 diputados, de Otto Pérez Molina, del Partido Patriota. Berger tuvo acercamientos con Álvaro Arzú.
Junio
Congreso aprobó, el 21, las reformas al Impuesto Sobre la Renta y la creación del Impuesto de Apoyo a los acuerdos de paz.
Julio
La primera baja del Gobierno fue Arturo Soto, ministro de Gobernación. Berger sustituyó a la plana mayor de esa cartera.
Agosto
Berger presentó con bombos y platillos el plan económico Vamos Guatemala, siete meses después de haber asumido el mandato.
Noviembre
El gobierno accede a pagar un aumento en el subsidio a los transportistas urbanos, luego de amenazas de paro.
Diciembre
Anuncian relanzamiento del Pacto Fiscal y, como agenda prioritaria, la seguridad.
Año 2005
Uno de los temas que se ubicó en el centro de la discusión fue la gobernabilidad, debido a la conflictividad elevada de diferentes sectores descontentos: Ex Pac, maestros y movimiento en contra de la firma del TLC. No sólo esto bastó para desatar en el primer trimestre el bum de la minería, ya que el altiplano exigió obtener una determinación acerca de los efectos de la exploración y explotación minera, muchos respondieron no. Producto de ello, la acción peliculesca de las fuerzas de seguridad a favor de la empresa privada por transportar un pequeño engranaje para su gran industria dejó un saldo de varios muertos y muchos heridos. Situaciones como éstas, con una falta de visión estratégica por parte del gobierno por anticipar ciertos escenarios, fue coronado como una guinda en el pastel de ingobernabilidad, la Tormenta Stan y sus devastadores resultados.
Una situación que dejó evidenciar la poca definición del gobierno de Guatemala frente al tema de migración, ya que Estados Unidos se resguardó del resto del mundo por su aprensión a que todo el mundo es terrorista y está en contra de ellos, no sabemos de dónde sacan estas ideas. Pero lo que si sabemos es que los principales afectados son los migrantes los cuales sufren serios vejámenes en el camino para llegar a la oportunidad de ganar el billete verde, si es que llegan a su destino, pues como no se encuentra “legal” no tiene derechos porque seguramente no es humano.
Año 2006
Ya con una agenda pre-electoral no se hicieron esperar las múltiples ofertas del narcotráfico por agenciar y garantizar los espacios de poder, no es casualidad que nunca se aprueben las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos en materia de transparencia en el financiamiento de partidos políticos. No hay que olvidar que también se anticiparon varios partidos políticos en su propaganda, a lo cual el TSE no hizo nada.
En lo social no hubo mayores cambios. La ayuda por la tormenta Stan nunca llegó a sus destinatarios. En seguridad sí hubo cambios, ya que las cifras de violencia se incrementaron, así como una inexplicable ola de muertes violentas de mujeres etiquetadas como “por prostituta” o “por marera” con lo cual no se hizo nada, más que un par comparsas de las fuerzas de seguridad por “atacar” las zonas rojas, como la criminalizada zona 3 que fue cercada para mantener controlados a los narcotraficantes... los que seguramente ya no estaban allí. Y cómo olvidar, en este mismo sentido, a la “toma de control de Pavoncito” en la cual murieron extraoficialmente varios reos sindicados de no pagar lo convenido al nuevo Director del Sistema Penitenciario, lo cual fue aplaudido.
Finalmente el Sistema Bancario entró en crisis y dio bienvenida al nuevo año 2007. Miles de guatemaltecos y guatemaltecas se quedaron sin efectivo a fin de año y casualmente fue finiquitado el señor Eduardo Gonzáles, posible candidato por la GANA, del escenario político y empresarial. Bancafé se convirtió en Bancafué.
Año 2007
Con la crisis bancaria que inició el 2007, también se finiquitó el Banco de Comercio y con ello, una cantidad de cuentahabientes se quedó sin su dinero. Casi un mes después de esta crisis son asesinados 4 diputados salvadoreños del Parlacen y 1 piloto, por lo que fueron capturados 4 agentes de la PNC que también fueron asesinados en su celda de máxima seguridad, aduciendo primero que habían sido mareros, pero luego se evidenció que se escondía más. Este escándalo en la cual la PNC se evidenció totalmente corrupta puso en el centro del huracán al señor Ministro Carlos Vielman, quien goza hoy de un azucarado exilio al igual que el Director de la PNC, Carlos Sperissen.
La inseguridad tocó fondo, las muertes violentas continuaron y fueron “tomadas” por mareros muchas colonias a cambio de extorsiones y secuestros rápidos. Aunque el cambio de ministros no garantiza mayor cosa, el colapso de la institución responsable de la seguridad es evidente, y aunque se han realizado algunos avances, dudamos que 6 meses hayan sido suficientes para levantar esta institución.
Por si fuera poco, una noche el suelo retumbó y abrió las entrañas de la zona 6, llevándose entre las alcantarillas colapsada a una familia y varias viviendas. Luego de muchos meses se han empezado a realizar acciones, pero la población afectada no recibió mayor apoyo.
Seguridad Justicia Salud Educación
Dos temas son importantes para este gobierno, por un lado la seguridad que va de la mano con la aplicación de la justicia y por otro lado las políticas sociales que se impulsarán, específicamente en educación y salud.
En Praxis hemos comentado mucho acerca de seguridad. Las instituciones encargadas de seguridad deben fortalecerse, la PNC, el SP y Migración, las cuales deben pasar necesariamente por un proceso de depuración pues el Ministerio de Gobernación, a lo largo de los años, se ha constituido bajo este reglón. Nos merecemos instituciones serias y responsables, no doctorados en circos mediáticos para esconder el monstruo de corrupción y negligencia que inunda al Estado; sino profesionales visionarios, prestos a responder las demandas básicas de la población, y más que demanda, el derecho legítimo de seguridad. A esto se une de igual manera un engranaje importante para que la seguridad vaya mas allá de ser una sensación y es la aplicación de la justicia, que lejos ha estado de sostener la balanza con equilibrio y eficiencia. Tal como en muchas esferas del Estado, quien tiene dinero tiene el beneplácito de la señorita Justicia en su favor. Mientras los Oficiales y Jueces sigan siendo negligentes y comprables, mientras no se realicen las necesarias reformas al Código Penal y Código Procesal Penal, mientras no se transforme y se actualicen los juicios basados en simples testimonios “el dijo” “ella dijo” y no se cuenten con pruebas científicas recabadas por una institución profesional como el MP con el apoyo fundamental del INACIF, estaremos lejos de lograr un Estado de Derecho.
Si todo este aspecto ha ido mellando en la percepción que tienen los guatemaltecos y guatemaltecas sobre las instituciones del Estado, más aún las que dan apoyos fundamentales como salud y educación. El colapso de la población frente a hospitales vacíos, sin medicina, con poco personal y escuelas vacías, sin pizarrones, ni escritorios, ni libros, ni, ni, ni, ni, ni nada. Todo está en que usted tenga dinero y entonces tendrá acceso no solo a educación, que no se le garantiza sea buena, sino también tendrá la gran oportunidad de entrar a la red denomina “sangremos al enfermo” que se dedica a la salud, para lo cual pagará cantidades insospechadas para que le hagan miles de exámenes y consuma toda la medicina del mercado. Es decir, que los que no tenemos dinero, esperaremos lo mismo, solo que prestando dinero antes del fin de mes para comprar su pan pequeñito de 30 centavos y sus 5 tortillas por quetzal, sin tener nunca oportunidad de crecer y menos de sobrevivir si se enferma de casualidad. No es solo con una mayor asignación presupuestaria, es necesaria la planificación, la priorización, para avanzar en la consolidación de políticas públicas que sean parte del desarrollo de la población.
Finalmente,
Adiós Beger,
PRAXIS
